Saludo a los Jóvenes Investigadores en El Hatico

El mundo que dejaremos a nuestros hijos debe  ser un mejor lugar para vivir que el que recibimos de nuestros padres.

Elsa Victoria Echeverri

Un agradecimiento sincero a CIPAV Colombia, a la Fundación Produce Michoacán de México, Cendigranja de Venezuela, a la Universidad Sao Joao do Rei de Brasil; al Centro Brasileiro de Pecuaria Sustentavel de Brasil, al INTA – Misiones de Argentina  y a sus líderes Martha, Rogerio, Mauroni, Nahuel y Enrique; por propiciar este espacio de aprendizaje y alegría, donde se construirán nuevos elementos teóricos y  prácticos que los llevarán al cuestionamiento de sus propios pensamientos, a reforzar sus propias convicciones, a valorar más a sus familias, sus países, a motivarlos a cambios de actitudes que los lleven a convertirse en guías, líderes, constructores de comunidades de amor, vida y paz.

Estamos seguros que estos días los harán crecer como personas, como profesionales con un compromiso real y decidido frente a su propia vida y frente a los demás.

Este curso móvil internacional tiene como hilo conductor los valores y las sustentabilidad rural. Permanentemente oímos hablar de la  crisis de valores, la inversión de los valores, la necesidad de recuperar los valores de nuestros antepasados o el  educar los valores…. Es posible que la palabra valor se haya convertido en un término ambigüo, trivial, carente de sentido. Se hace necesario repensar y contextualizar lo valores que hacen posible la vida rural. Estos tienen sentido si se relacionan con otros conceptos igualmente valiosos: el bien, las metas a alcanzar, el proyecto de vida. Son el alma de las normas, la emoción y la motivación que hace posible la acción.

Los valores no pueden existir sin apoyarse en actos humanos.

A lo largo de este gran recorrido por nuestra querida geografía colombiana, tendrán posibilidad de compartir y vivencia estos valores encarnados en personas y comunidades que a diario luchan por realizar actos buenos, justos y solidarios.

Hoy la familia Molina Durán y los colaboradores de la Reserva Natural El Hatico queremos expresarles nuestra alegría por tenerlos aquí.

Para Enrique Murgueitio en nombre de Carlos Hernando Molina, María Isabel y el mío, nuestro cariño sincero y un infinito agradecimiento por hacer partícipe a Juan José de esta maravillosa experiencia y por estar siempre presente en nuestra vida.

Reserva Natural El Hatico, 29 de junio de 2011.